Ideas creativas para niños difíciles de comer
¿Cómo hacemos para que coman nutritivamente?
Existen diferentes tipos de niños difíciles de comer. Entre ellos están los que odian los vegetales, los que comen alimentos de un solo color, los amantes de la comida chatarra, los que separan los alimentos, los de las texturas, los amigos de los carbohidratos, los que siempre comen lo mismo y a los que no les gusta la fruta. Te suena alguno familiar? Sé lo frustrante que puede ser que nuestros hijos solo quieren comer un tipo de alimento o que no quieran comer lo que creemos es lo mejor para ellos. Y te entiendo, ¡no estas sola!. Como padres nos sentimos en la obligación moral de darle a nuestros hijos lo mejor para que estén óptimos en su salud. ¡Y no te preocupes! Estamos aquí para ayudarte y guiarte con pasos que te ayudarán a sentirte más tranquila en cuanto a su alimentación concierne.
Todo entra por los ojos y si bien es cierto, si le ponemos un tomate en el plato a nuestro peque que no come tomate, lo más probable es que no lo coma, se lo regale al perro, grite, chille, lo esconda entre servilletas y salga corriendo. Ante este escenario, ¡OM y paciencia! Tomará alrededor de 15 a 20 veces antes de que quiera aceptarlo. Sin embargo, existen varios trucos que se pueden emplear para que nuestros hijos coman y de esa manera tengan una alimentación balanceada y nutritiva. A continuación te comparto algunos tips que te ayudarán a balancear la alimentación de tus hijos para que coman nutritivamente y estén siempre fuertes y sanos.
Uno de los trucos más eficaces que conozco es disfrazando los alimentos de una manera que nuestros hijos no se den cuenta de lo que están comiendo. Por ejemplo, las frutas preparadas en jugos y las verduras en cremas o purés. Algo que me resulta exitoso, es prepararle puré de espinaca a mi hijo. A simple vista, mi hijo no come la espinaca, pero si la preparo ahumada (para que no pierda su valor nutricional ya que si expones la espina a mucho tiempo de cocción, pierde sus nutrientes) y la licuo con papas sancochadas, el resultado es un delicioso puré de espinacas. Al no ver la contextura y la forma rara de sus hojas, mi hijo se la devora sin dejar rastro en el plato. Lo mismo me sucede con las frutas. Al licuarlas y cambiarles la contextura, mi hijo sin saber lo que es, se toma hasta la última gota de jugo de su vaso. Le licuo plátanos, con fresas y arándanos y otras veces mango con frambuesas y higos. Trato de elegir las frutas más maduras porque son las que van a estar más dulces. Evito agregarle azúcar y utilizo leche de coco o de almendras.
Otra manera efectiva es preparando su salsa favorita. Por ejemplo, ¿a qué niño no le gusta el guacamole? La palta es un súper alimento que contiene grasas que ayudan a absorber nutrientes de otros vegetales. Por esta razón, cuando le des guacamole a tus hijos, bríndaselo con verduras o tubérculos al horno como papitas, camotes, zanahorias, brócoli o coliflor. Verás que se devorarán todo en un abrir y cerrar de ojos!
Por otro lado, los huevos revueltos son los favoritos de nuestros hijos. Que tal si se le agrega algún vegetal como coliflor o brócoli? Si estos se los pica chiquitos, de tal manera que al mezclarlo con los huevos desaparezcan, se les puede hacer una deliciosa tortilla que a su vez, se le puede agregar su salsa favorita.
Mi última recomendación es evitar que coman entre horas y sobre todo evitar que coman golosinas y gaseosas. Si les damos alimentos entre horas, es muy probable que a la hora del almuerzo o de la cena no estén tan hambrientos y por ende no coman lo que deben de comer para poder mantener un balance en su alimentación. En caso de que tu hijo esté con mucha hambre, lo más recomendable es que le brindes una fruta, nueces o algún vegetal como zanahorias, apio y pepinos.
Espero que estos tips te ayuden a brindarle más nutrición a tus peques sin tener que corretearlos por toda la casa para que coman un bocado. ¡Hasta la próxima!
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