El Mejor maestro del mundo
Hoy paso algo muy lindo mientras acostaba a Leo y Marce en sus cama, recordé mi niñez, digo lindo porque no siempre me sucede. Les cuento un poco, sé que tuve la mejor de la niñez, me crié en provincia donde me divertía hasta el cansancio, jugaba en la calle con los amigos del barrio, poníamos piedras en la pista para jugar fútbol, salimos andar en bicicleta o en moto por las manzanas cercanas a casa. Cosas que también deseo que vivan nuestros mellizos en alguna oportunidad, porque aquí en Lima es cada vez es más difícil por los pocos espacios libres que encontramos. Pero por ahí no va el post, va en lo que vivía dentro de casa, que puede pasar en cualquier casa sin importar donde vivas. El amor de los padres hacia los hijos.
La hora de dormir aquí en casa tiene sus horarios y su método, nosotros nos echamos juntos en la cama a mirar un poco de dibujos o leer un cuento mientras nos da un poco de sueño, siempre alrededor de las 8:30 pm, luego tomamos la leche y de ahí pasamos a cada uno a su cama, y una costumbre que tengo que desde que nacieron Leo y Marce es darles un beso en la frente y decirles hasta mañana.
Lo singular de esto es que eso lo aprendí de mi Papá, hoy luego de hacerlos dormir me di cuenta de eso y no saben la alegría que sentí en aquel momento.
Es cierto cuando dicen «que las buenas costumbres se aprenden en casa», «que la mejor escuela esta en casa junto a los padres». Hoy lo reafirme.
Este pequeño post está dedicado a ti Papá, «Bapu» como te llaman tus nietos. Gracias por siempre acostarme de pequeño, de hacerme sentir que siempre estarías ahí cuando tuviera miedo de noche o ser aquella mano que siempre estará para ayudarme a levantarme si fuera a caerme.
Por enseñarme que la familia es el tesoro más preciado que tiene uno, que no hay que tener temor a equivocarnos porque así aprendemos y nos volvemos más fuertes.
Ahora mientras cuido el sueño de tus nietos, se que tu también cuidabas el mío. Cuando los mellizos corren a mis brazos buscando consuelo, se que también los tuve en los tuyos.
¡Con cada cosa que hago siento que tuve el mejor profesor de mundo!
Gracias Papá por enseñarme que lo mejor que tengo en la vida son los que me rodean, mi familia, ¡nuestra familia!
Gracias por darme un beso al acostarme cada noche y hacerme sentir que era el centro de tu universo.
Te quiero Papi
#PapáGallina
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